Una carretera no se construye de la noche a la mañana. Una vez que se tiene el proyecto hay que seguir una serie de pasos que garanticen la buena construcción de la carretera:
- Limpieza y desmonte: se elimina la capa vegetal que cubre el suelo.
- Movimiento de tierras: se corta el terreno para adaptar la zona al trazado de la carretera.
- Drenaje: se construyen el sistema que permite evacuar el agua.
- Base y sub-base: se establecen las bases de la calzada que soportarán y repartirán el peso de los vehículos.
- Pavimento: es la carretera en sí, la capa superior del terreno.
- Puentes: se construyen si hay que salvar un obstáculo para dar continuidad al trazado de la vía.
- Marcas de tráfico: señales, líneas y todo lo que asegura la buena circulación del tráfico.
Una vez finalizado esto, la carretera puede ser abierta al público. Si tienes alguna duda o quieres conocer mejor el proceso puedes consultarnos: somos una empresa experta en construcciones de carreteras en Sevilla.
